Se cumplen ocho años del triunfo en Angola
Aún recuerdo mis llantos de emoción. El mundial de Angola 2013, no fue un mundial cualquiera. El escenario era idóneo. El gran Luanda Arena era el teatro perfecto para seguir una de las mejores actuaciones que hemos visto en nuestro deporte. Podríamos llegar a decir que nuestro complejo de deporte pequeño menguó, aquel campeonato nos hizo sentir grandes.
Hoy se cumplen ocho años de la gran final. Del señor de la mopa y sus bailes autóctonos. Del gol de Pedro Gil que nos levantó del asiento. Todo era perfecto. Aquel equipo acababa de ganar su quinto mundial consecutivo.

FOTO: FEP