Programación semanal eficiente del entrenamiento

Hola a todos. En esta ocasión os vengo a hablar de un tema básico a la hora de obtener unos buenos resultados en la temporada. No es un tema especialmente técnico ni complicado de entender, pero lo cierto en base a mi experiencia en este deporte es que para nada se le saca el partido que se le podría sacar. Hablaremos de la planificación semanal del entrenamiento.

A la hora de estructurar los entrenamientos de cara a una semana en concreto, hay que tener claro cuál es nuestro objetivo, que seguramente sea el de obtener un pico de forma el día del partido. Es muy frecuente encontrarse con políticas del entrenamiento fijas de antemano, es decir, clubes en los que cada lunes hay físico, martes hay ensayo de jugadas, y jueves se hace un partido para practicar contra otro equipo de tu club, por ejemplo. Y todos los jugadores, independientemente de su rol, realizan exactamente los mismos entrenamientos durante toda la semana.

En los equipos de élite, que cuentan con un cuerpo técnico más especializado, esto no sucede así. Pero, ¿qué factores se deben tener en cuenta?

Pues en primer lugar, la fatiga. Hay que entender que la fatiga, tanto física como mental, va a determinar nuestro estado en el partido. Eso significa que un jugador se tiene que entrenar en base a su nivel de fatiga. Debe llegar al partido descansado, y debe recuperarse del esfuerzo realizado en el partido. Bien, para ser eficientes hay que entender que para mejorar la forma física, un atleta debe sufrir un estímulo de esfuerzo significativo, y obtendrá la mejora al recuperarse (sufrimos un esfuerzo, nos fatigamos, y al recuperarnos de la fatiga toleramos más esfuerzo que antes). Por lo tanto, cuando los jugadores deben esforzarse más no es el día de antes ni de después del partido, ya que estos deben ser más livianos para gestionar de forma correcta la fatiga. Un esfuerzo físico mayor será más correcto introducirlo en los días intermedios de la semana.

También cabe destacar que no todo el equipo se fatiga de forma igual. Dependerá de la capacidad física del jugador, de cuánto tiempo han jugado, de cuánto se ha movido en la pista mientras jugaba, de la exigencia del partido… Todo esto debe estudiarse por parte del entrenador, y planificar el entrenamiento de forma individualizada según el rol del jugador.

En segundo lugar, el equipo rival. Cada equipo demanda cualidades diferentes, y estudiarlas y adaptarse a ellas es muy importante.

En tercer lugar, la frecuencia de partidos. Si juegas tres partidos en diez días, no tendrás lugar a sesiones físicas muy fuertes. Sin embargo, si tienes dos semanas para un partido, podrás dar más carga física a los jugadores. Este concepto está claramente relacionado con la fatiga.

Bien, espero que os haya parecido útil el contenido de este artículo. La verdad que es un tema enfocado de forma muy sencilla, explicado de forma muy básica, pero que considero que en una gran mayoría de los casos, no se tiene en cuenta alguno de estos factores, y que los entrenadores no gestionan de forma correcta los entrenamientos.

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FOTO: GABRIELE BALDI